Servicios Generales Bursátiles S.A. de C.V.Su mejor alternativa de inversión

Integración Bursátil Cumple un Año

El pasado 16 de mayo se cumplió el primer aniversario de la integración bursátil entre  El Salvador y Panamá.  Según un dato  de la Bolsa de Valores de Panamá, la cantidad total negociada  corresponde a 59.1 millones de dólares. “No esperábamos tal volumen, aunque tampoco teníamos metas en montos ni en el número de transacciones, debido a que no se tienen referencias para una medición”, comenta Olga Cantillo, gerente de la institución.

Al desmenuzarse la cifra   se observa que en la integración intervinieron seis operadores remotos, o figura mediante la cual se evita la participación de un intermediario para que las casas corredoras de bolsa salvadoreñas y los puestos de bolsa panameños hagan transacciones en los sistemas de las dos sedes bursátiles.

De parte de Panamá intervinieron tres  operadores, todos vinculados con entidades bancarias. Dentro de poco se sumará uno más con el mismo perfil. De parte de El Salvador participaron  tres operadores independientes.

Hasta hace tres semanas se registraron más de 250 negociaciones, la mayor parte de ellas surtida por los participantes salvadoreños. Es una cifra satisfactoria para ambos mercados, sin embargo, los centroamericanos  sacaron  mejor provecho de esta integración. Los números así lo expresan.

“Para nosotros, en nombre de El Salvador, y como casa corredora de bolsa, ha sido una gran oportunidad para que nuestros clientes tengan la posibilidad  de diversificar más su portafolio de inversión”, valora Patricia Duarte de Magaña, gerente general del operador remoto Servicios Generales Bursátiles. La comentarista reseña  cómo la integración ha sido muy beneficiosa para los emisores tras el hecho de que tengan ya una calificación de inversión.

Dice Cantillo que el balance es muy positivo, tanto por el monto absoluto negociado, como por el número de transacciones. Destaca  la eficiencia   tecnológica de la integración, más la transparencia de una plataforma en  la que los sistemas de negociación de ambas bolsas “se manejan a ciegas”. El comprador desconoce quién es el vendedor. “Se hacen las transacciones según se ponen en las órdenes”, agrega.

En este sentido, Duarte resalta el obligatorio cumplimiento que supone para una casa corredora de bolsa salvadoreña el perfilar a los clientes y cumplir con las normas de due dilligence.  Un comportamiento  homogéneo en las dos bolsas.

2019

En el segundo año de funcionamiento se espera  una profundización en las transacciones e inscribir más operadores, pero sobre todo nuevos inversionistas y emisores.  En el período 2017–2018, próximo a expirar, la integración se enmarcó por la negociación prevalente de títulos de renta fija en el caso  salvadoreño. “No se están comprando instrumentos de renta variable. Debemos estudiar y analizar cómo hacer atractivos estos papeles”, anticipa Cantillo.

En un principio había expectación con el marco fiscal regulatorio salvadoreño. Las transacciones de bolsa en Panamá están exentas de gravamen, pero dicha carga se redujo  a 3% en El Salvador. “Ellos [tienen] el interés de llevarla a cero. Así serán equitativas las dos plataformas”, comenta Alexander Quezada, gerente de desarrollo de mercado de la BVP.

El éxito inicial en esta integración se acompaña del interés de incorporar  otros países de la región, para  alcanzar un mayor volumen de transacciones y de montos. “Se les abren las puertas a los emisores de otros países”, dice Duarte.

Quezada equipara la operación  de las dos bolsas con una carretera caracterizada por su capacidad de ensanchamiento  según los resultados iniciales. El regulador panameño está analizando las normas de Nicaragua. El objetivo: allanar el camino para que este país se sume a la autopista Panamá–El Salvador. Es decir, el acoplamiento de tres reguladores, tres bolsas de valores y tres centrales de custodia.    

“Este es un proceso de variaciones. De parte de Panamá se han hecho ya las gestiones ante el regulador de valores nicaragüense. En diciembre pasado se firmó un convenio de intención entre las bolsas de valores de El Salvador, Panamá y Nicaragua. Este país reconoce ya a Panamá como jurisdicción reconocida, a diferencia de El Salvador”, detalla Quezada.

Los resultados  de la integración bursátil son un espaldarazo para la Asociación de Bolsas de Centroamérica y el Caribe (Bolcen). Olga Cantillo revela que en los próximos meses “estaremos haciendo la presentación de la integración de nuestros mercados a nivel de Bolcen”. 

Agrega que en la búsqueda de mayor competitividad, la Bolsa de Valores de Panamá contactó al  proveedor del sistema de negociación Nasdaq, para reemplazar el Sitrel a finales de este año. “La idea es que nosotros desde Panamá podamos proveer esta plataforma, con el objetivo de que se tenga una pantalla única integrada entre los diferentes mercados”.

Nada se sabe del acontecer de mayo de 2019. Por ahora, el panorama es alentador.

 

Escrito por: Oscar Castaño Llorente

Tomado de: http://www.martesfinanciero.com/history/2018/05/22/dossier.asp

¡Invierte ya!